Rex, estudiante de antropología, se encuentra de excursión con su clase de ciencias, cuando tropieza con una antigua excavación. Fascinado por la cueva decide entrar, sin saber que es zona de pruebas de misiles del gobierno. De pronto y accidentalmente uno de los misiles explosiona atrapando a Rex que cae incosciente, cuando recobra el sentido, Rex sale de la cueva y descubre que el lugar no le es conocido y sus compañeros no están allí, en cambio conoce una hermosa joven llamada Eba quien conduce a Rex hasta una tribu donde todos quedan admirados de su moderno atuendo , pero empiezan los problemas a la vez que el romance entre Eba y Rex.
La película en sí no cuenta nada. Es una sucesión de escenas que se supone son graciosas. En alguna ocasión lo consiguen, en otras te dejan indiferente y en unas pocas querrías matar al guionista por ser tan básico. El protagonista quiere aparentar 16-17 años y está mas cerca de los 40 que de los 30, pero bueno, es gracioso. La música es totalmente ochentera y aparecen algunas tetas sin más, al estilo Porky´s o Desmadre a la americana.
SIn embargo tiene algo de la inocencia de esa década. No pretende nada y si se ve con esa actitud llega a entretener en muchas ocasiones a pesar de ser evidente que el presupuesto era mínimo.