Hablar de ‘Temblores’ me da pavor. Es una de esas películas que la primera hornada de “incultos” fílmicos la quiso encumbrar como obra de culto y pasado el tiempo nos damos cuenta que pertenece más a la obra rídícula que a la de culto.
Cuando aquella generación nacida a finales de los 60s y mitad de los 70s empezó a crear una serie de títulos de culto que hoy son venerados, produjo que hubiese un eco una década después con la siguiente generación de “cinéfilos”, el problema es que estos dedicaban más horas a jugar a videojuegos que a leer libro de cine y por causa-efecto, su calidad cinéfila era muy inferior a la de sus hermanos mayores. Y es así como películas del estilo “Temblores”, empezaron a ser aupadas por unos jóvenes que poco favor le hacían al cine.
‘Temblores’ es una película ridícula en todos sus apartados. Los actores rozan lo absurdo simplemente porque se nota claramente como ninguno creía en lo que hacía, nada tienen que ver las actuaciones de ‘Tiburón’, ‘Alien el 8º Pasajero’ o ‘La Cosa’ con las de esta película de monstruos. La producción es muy inferior también, pero eso no debería ser un problema si el equipo cree seriamente en lo que hace. Por supuesto en la dirección ni está Spielberg, ni Scott, ni Carpenter. El guión pues eso, un conjunto de personajes que rozán más lo payasesco que lo dramático o cómico profesional. Lo triste es que ‘Temblores’ es un fiasco respecto a las tres películas citadas pero, es mucho más digerible que toda la serie B actual idiota tipo ‘Sharknadoo’ que se ha hecho en este siglo.
En lo positivo destacar la presencia de Fred Ward, un actor muy olvidado que debió tener un mejor escalón dentro de la industria del que que tuvo y también, alabar en cierta medida las maquetas y los efectos practicos que se usaron para crear las criaturas. También mencionar que el duo protagonsita funciona como tandem buddy movie y por último hacer mención que estamos ante un filme de terror totalmente diurno, algo que ya vimos en ‘Tiburón’ pero que aquí debido al majestuoso desierto que se nos muestra, la luz y el sudor todavía son más evidentes.
El filme tuvo varias secuelas aún mucho peor que la original que por desgracia como digo, nada tienen de culto por mucho que los seguidores de ‘Final Fantasy’ y ‘Doom’ se empeñen en querer que así sea.