Puntuación: 7

El western es indestructible. El que fue el género por excelencia en los inicios del cine no pasa por su mejor momento pero aún así, es raro el año que no vemos algunas opciones interesantes y sin ir más lejos tenemos recientemente, Deuda de honor, Slow West o Los Odiosos Ocho. Hoy tenemos una nueva propuesta.

Como es normal, en un género tan clásico y con tanta obra maestra a sus espaldas la única manera de acercarse a él y no caer en el olvido es optando por añadir una faceta original que no hayamos visto antes. Esta vez, quizás sea el gore y el terror más seco y humano, el añadido que hace especial a esta Bone Tomahawk.
El film bebe directamente de la fotografía y los elementos tradicionales de un western puro del estilo de Centauros en el desierto en el sentido de su aporte crepuscular, añadiéndole eso sí, un extraño toque de Holocausto Caníbal para llamar así la atención e incluso poder llamar a la puerta de esa etiqueta tan querida conocida como obra de culto.

Kurt Russell, Patrick Wilson, Matthew Fox, y Richard Jenkins son los encargados de dar vida a los 4 antihéroes que poco a poco irán entrando en los más profundo del infierno. Sorprendente, atrevida, bien estructurada y de filmación cuidada la obra del debutante S. Craig Zahler, también guionista de la misma es más interesante de lo que aparenta a priori. Una buena opción este fin de semana para estómagos sin problemas.
Y recordad que recibió el premio a mejor dirección en Sitges.

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