Es la primera película cinematográfica de Steven Spielberg ya que no olvidemos, sus anteriores películas, incluida El Diablo sobre ruedas, eran películas creadas para televisión.

Pero, para Spielberg no hubo problema alguno, la película vista a día de hoy es una inconmensurable ópera prima que ya dejaba ver las capacidades creativas del hombre que un año después inventaría el blockbuster actual con esa joya llamada Tiburón.

La película no fue un éxito comercial aunque si fue aplaudida en Europa al obtener un premio gordo en Cannes (mejor guión). En España la película siempre tuvo la maldición de su título, el cual, ‘Loca Evasión’, lo único que hizo es llevar al público al engaño al creer este que estaba ante una comedia loca de los 70s y nada más lejos de la realidad.

La película ya aborda la obsesión más importante dentro del universo de Spielberg que es: La Familia, aunque eso sí lo aborda desde un prisma más salvaje al habitual en la piel sobre todo de Goldie Hawn, quién se convertiría en estrella gracias a películas como esta.

Spielberg ya es capaz de mostrar un ritmo frenético y de conmover en muchas de secuencias. Por supuesto a nivel visual ya podemos apreciar esa libertad de la cámara de Spielberg y ver el refinamiento de su técnica, la cual en sus inicios parece totalmente vinculada a lo móvil gracias a Amblin, su famoso contrometraje, El Diablo sobre ruedas y la película que recomendamos hoy.

Las largas carreteras, los atardeceres o el sonido de emisora de policía, son el decorado que usa Spielberg para dejarnos esas enormes secuencias donde una larga fila de coches de policía se convierte en el elemento visual de una película que va directa al corazón y al drama pero usando de forma inteligente, toques de comedia ligera.

Además podemos ver ya por primera vez a John Williams en la banda sonora y a Vilmos Zsigmon en la fotografía.

La película posee el espíritu libre de lo que fue el inicio del nuevo cine americano. El cine en estudio deja de existir, lo cual supuso tener un menor control sobre las producciones, pero mayor aire de realismo y naturalidad, y el cual por cierto en la actualidad ha sido llevado a tal extremo que el cine se ha visto perjudicado. Por suerte aquí como en toda la obra de Spielberg, ese nuevo naturalismo cinematográfico, no abandona lo teatral y ficticio de lo clásico lo que dota al filme de una estética que navega entre lo mejor de los dos estilos.

Así, Loca Evasión es una película libre que inicia una nueva etapa del cine gracias a quien la dirige; Es también una road movie atípica donde el drama y la comedia se entremezclan para alcanzar un tono perfecto y muy difícil de conseguir; es también esa película de atardeceres vista a través de una ventanilla de coche; es esa película donde las luces de las sirenas de policía iluminan el sur de Estados Unidos; es un canto a la libertad sin condenar a quienes condenan; una película que sin duda no debes dejar de ver.