Un magnífico debut del interesante Lawrence Kasdan, tanto es así que sigue siendo su mejor película hasta la fecha. Un guión muy bien escrito, una historia relativamente sencilla que se va complicando pero sin llegar hacerse ininteligible algo que a veces sucede en el cine negro.
Un director que ha recuperado géneros como el western, el cine negro o el drama romántico con gran cinefilia que ha demostrado en su carrera que un guionista (escribió “En busca del Arca perdida” y “El Imperio contraataca”) puede llegar a ser un buen director.
Destacar a los actores, una bellísima Kathleen Turner que hace su debut el que sigue siendo su papel más celebrado. Willam Hurt como siempre más que correcto, muy creíble y convincente, también unos secundarios como Mickey Rourke y Ted Danson rayan a gran altura.
Una película de género que no tiene mucho que envidiar a las más aclamadas de los clásicos.
Altamente recomendable, una de las películas donde la sensación de calor y bochorno mejor se ha transmitido y con una alta carga de sensualidad.
Una lástima que Kasdan se haya perdido como director (“El cazador de sueños”) y que la Turner la diese por engordar prematuramente con lo que perdió muchos papeles, siendo sustituida como mito erótico por Sharon Stone (ella iba a ser la protagonista de Instinto Básico) o Kim Basinger.
En definitiva no se la pierdan. Película muy notable de las que casi no se encuentran ya.