Sí, todos sabemos que Will Smith golpeó en la cara a Chris Rock, incluso algunos saben que un actor afroamericano golpeó a otro afroamericano. Por supuesto ahora conocemos que Jada Pinkett sufre alopecia remarcando el término de sufrir, pero ¿alguien sabe quien ganó el Oscar a mejor director, a guiones, a fotografía, a diseño de producción, incluso a mejor película? Ese es el gran problema de una ceremonia que ha tocado fondo.

Hubo un tiempo donde los Oscar eran lo más. La gente en nuestro país y en el resto del mundo veían la gala en directo fuese la hora que fuese y durase lo que durase. Al día siguiente la ganadora o los ganadores eran deidades del planeta al menos por una semana. La película que se alzaba con las estatuillas gordas se reestrenaba en salas y se cambiaba su cartelería decorándola con el número de figuritas de oro que había conseguido. Los videoclub se preparaban y dejaban hueco meses antes para recibir con honores al rey del videoclub durante meses y por supuesto al día siguiente de conocer los premios de la academia, todo el mundo debatía sobre quién había ganado, como y por qué.

Ayer lunes tanto en la calle como en la televisión o la prensa, lo único que se comentó del evento fue la torta del príncipe de Bell-air. Y esto amigos es un clavo más en el ataud de un arte y entretenimiento llamado cine que la nueva forma de vivir y entender el arte por parte del público y sobre todo, la nueva forma de gobernar el cine por parte de los accionistas de las tecnológicas, están haciendo que asistamos a un triste funeral de lo que ya se conoce como la máxima expresión de arte que jamás tuvo el siglo XX. ¿Alguien es capaz de decirme nombres y apellidos de un productor de cine actual?