La saga House, o al menos, sus dos primeras entregas que son las que merecen la pena, llegan gratis a Cinematte Flix.
Si hubo una década en la que verdaderamente me gustaban las películas de terror era la de los 80. No fue concretamente en esa época in situ cuando las veía, ya que yo nací al final de ella, pero si en el inicio de la siguiente. De esta afición (quizás extraña para un niño) tiene parte de la culpa o el merito mi madre, ya que hacíamos los dos unas largas maratones de este genero de cine. Digo culpa o merito porque no se si fue como castigo, o como premio, no lo recuerdo, el caso es que yo siempre le pedía más y más.

Como sabéis, antes no disponíamos de diversas plataformas streaming como tantas hay ahora y en la televisión solo cabía esperar si había suerte, y ponían algo que fuera interesante, pero aferrados a un género tan concreto, era difícil. Aquí era donde entraba en escena mi padre. Si algo le ha caracterizado siempre es que le encanta todo tipo de cine. TODO. Y por ello, y porque iba a las salas a ver películas más bien poco por trabajo, solía comprar o alquilar (¿os acordáis?) las novedades en VHS, que por aquel entonces eran mas bien pocas, la verdad.De esta manera los fines de semana, que era normalmente cuando las adquiría, nuestra casa celebraba particular fiesta del cine de terror.

Veíamos de todo: El resplandor, Posesión Infernal, Creepshow (aunque era en un formato más episódico y su clave era más satírica), La Mosca, Poltergeist, Pesadilla en Elm Street, La Cosa, Los Chicos del Maíz, Gremlins (aunque esta también era más satírica), Jovenes Ocultos, y muchas más que no voy a incluir porque quizás esto se quede un poco largo.
Y mira por donde hoy queremos rememorar una cinta, o mejor dicho una saga de ellas, que pasó para muchos desapercibida. Hablo de la saga House, que sinceramente no se porque no se reivindica más esta antología de películas, ya que tiene todo lo que funcionaba por aquel entonces: bichejos raros hechos con marionetas gomosas, sangre y casquería a capazos, villanos muy perturbados, y maquillajes de lo más elaborados.

HOUSE: UNA CASA ALUCINANTE | 1985 ‧ Terror/Comedia ‧ 1h 33m

No es ésta la típica película de terror con casa fantasma y en parte se agradece ya que en lugar de hacer pasar un mal rato lo que pretende y en cierta manera consigue es entretener dentro de un tono de comedia. Aunque no sea lo suficientemente interesante el argumento, éste se sigue con agrado gracias a la amenidad y cierto sentido del humor que caracterizan lo que en principio es una historia de desgracias y presencias aterradoras.

CASTELLANO SD

La cinta, si bien es de terror, va en clave cómica con algunos aspectos surrealistas que la distinguen de cualquier producto convencional sobre casas encantadas.
Desde ese aspecto puede que la cinta sea original (pero tampoco es para exagerar su inventiva) aunque lamentablemente el filme se torna demasiado delirante y vulgar en su texto narrativo como para poder decir que la opción es de calidad.En sí es una cinta aceptable, aprobada con un justo 5 ya que entretiene pero miedo no causa nunca. Y si la analizamos desde su comicidad me quedan muchas dudas de que pudiera ser sólida desde esa perspectiva también.


La historia pasa por una casa encantada, una especie de portal hacia una dimensión desconocida donde habitan extraños entes con forma de monstruos.No hay suficiente desarrollo ni una estructura narrativa lo suficientemente fuerte como para atrapar en emotividad, sino que por el contrario el argumento se despliega con un perfil muy liviano y superfluo típico de las comedias de terror con mucho disparate dando vueltas.Desde las actuaciones estamos en presencia de las típicas que suelen verse en este tipo de productos donde no hay mayor compromiso actoral como para que se destaque alguien por algo en especial. William Katt asume al protagonismo principal del filme, con una composición normalita que satisface los escasos requisitos que una cinta como ésta requiere desde las interpretaciones.Desde los apartados técnicos tenemos una casona que sirve como escenario para desarrollar principalmente la acción, algunos efectos especiales bien logrados y por otro lado un gamberro vestuario para recrear lo fantasmagórico acorde a las características de serie B de la cinta.


Cabe aclarar que la cinta es light en sus variantes, no tiene nada de sangre y apenas hay sugeridas algunas situaciones de desmembramientos pero apenas esbozadas ya que la propuesta principal de este filme es el delirio cómico y surrealista de fantasmas de otra dimensión que hacen contacto en esa casa que da el título a la obra.

HOUSE II: AÚN MÁS ALUCINANTE | 1987 ‧ Terror/Comedia de terror ‧ 1h 28m

Cierto es que no es la mejor película de terror. Ni siquiera es de terror, pero llevo viéndola desde pequeño y siempre me ha parecido un thriller desternillante.

Qué justo que le cabe el título de alucinante a esta película, pero no por impresionar o impactar, sino de lo delirante que resulta en sus circunstancias.


Aquí la propuesta es la comedia con escasos visos de terror. Bien pareciera más una cinta cómica de aventuras que un filme que tenga horror en sus alternativas.El argumento es tremendamente bizarro y tosco, pero en su vulgaridad e incorrección no deja de ser aceptablemente simpático y ameno de tan absurdo y trastornado que resulta.Es una cinta apartada de altas pretensiones, que se ubica como una comedia de enredos extravagante sobre una leyenda que resulta tan cutre que nos lanza a la carcajada. No me da vergüenza decir que me lo pasé muy divertido con esta fantasmada llena de desparpajo y cutrez.El argumento es una alucinación absoluta, tan absurdo en sus alternativas que uno pierde enseguida la seriedad y termina divirtiéndose bastante ante tanta tosquedad narrativa, ante tantos carismáticos personajes, ante esos efectos especiales que llamaban la atención no tanto por su calidad sino por el ingenio, ante el diseño estético de algunas locaciones internas de esa casa donde coexistían diversas y alocadas dimensiones, ante los embrollos que se suscitaban entre los estrafalarios personajes y la fenomenología paranormal desquiciada que provenía del interior de la casona, ante tanto despilfarro de irracionales situaciones…


En fin, a mi me gustó, supe cambiar el chip a tiempo y darme cuenta de qué iba la cosa. Aviso que no es una cinta para tomarla en serio, ni para esperar sobresaltos porque se perfila mucho más a ser una comedia delirante y efectiva desde su torpeza que a una opción de miedo.Sin dudas que si se quiere una opción desequilibrada que pierde las formas y el tino en todo el metraje, ésta es una opción pasable desde la rudeza y la chabacanería desplegada.Un cinco alto, incluso es más divertida que la primera parte, aunque distinta también en su carácter.

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